Dichoso es si existe el dueño de esta perla, de esta obra, de arte de esta boca de miel, le dije ahí nomas a pesar qe existia ...ni papel ni biromes derechito al hotel, supe que era casada con problemas de pareja y que no soportaba gente de mal humor, supe que enloquecía con los besos en la oreja que en la cama y desnuda baila mucho mejor...
Ella le caía bien a todos mis sentidos, salvo cuando el marido era el tema de hablar, cuando su confesión lastimo mis oídos me dije no la escuches no te ahogues en su mar. Yo abrí de par en par las puertas de mi alma y deje que saliera mi secreto peor ...disimulando lo triste y conservando la calma, le dije aunque no creas estoy buscando amor, nou nou...
Nos rendimos los dos a fingir como tontos que yo era su marido y ella era mi mujer pero al cabo de un tiempo yo no quise ser su esposo y ella quiso volver a ser la dama infiel ahora esta feliz volvió con el idiota.
Yo recorro las calles buscando otra mujer y aprendí que mentirse tiene patas muy cortas y que siempre la costumbre va a matar al placer.
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